"De mi infancia recuerdo las tardes que pasé jugando con los amigos. Muchos de los chicos a los que conocía eran italianos y a menudo me invitaban a merendar. Yo comía sus dulces, escuchaba a sus madres hablar en italiano, aspiraba olores que no conocía. A veces ponían en un tocadiscos romanzas de ópera. Tal vez de ahí nació mi gusto por las melodías, y cuando me decían que parecía italiano por mi aspecto físico no me enfadaba en absoluto; lo tomaba como un cumplido". Así se expresaba hace unos años, Billy Joel en una conferencia de prensa en Milán: bellas palabras y bellos recuerdos de una infancia transcurrida en Long Island, antes de convertirse en un gran cantante. Hombre fascinante y sincero, autor de melodías inolvidables, personalidad coherente, capaz de crear un estilo independiente de las tendencias del momento, Joel pertenece a esa clase de artistas del rock que no han necesitado seguir los ritmos del mercado discográfico. Durante las largas pausas que suele concederse, se dedica a su familia (está casado con una bella modelo de alta costura), a los viajes, al contacto con la naturaleza. Sus canciones son el fruto de un trabajo desarrollado sin prisas, como resultado de una madurez que sabe traducir sus ideas en una perfecta armonía entre la música y las letras.
Además, Billy Joel es una perfecta figura del espectáculo, un cantante potente y sensual con un repertorio de inolvidables canciones. Billy Joseph Joel nació en Long Island en 1949. Posee dos grandes pasiones: la música y el boxeo. Durante muchos años tomó lecciones de piano clásico, pero, siempre que podía, abandonaba a Chopin y Debussy y corría al gimnasio a ponerse los guantes. Estas dos pasiones no convivieron durante mucho tiempo, y al final venció la música. A mediados de los años sesenta formó su primer conjunto: The Echoes. En 1968 cambiaron su nombre por el de The Hassles: el grupo practicaba un rock veloz y melódico, no muy original pero lo bastante simpático como para llamar la atención de los responsables de United Artists, que les ofrecieron la oportunidad de entrar en los estudios de grabación. El resultado fueron dos álbumes de poca fortuna: 'The Hassles' (1968) y 'Hour of the wolf' (1969). La pobre acogida recibida por sus primeras composiciones impulsó a Joel a modificar la formación y, con su amigo Jonathan Small, formó el dúo Attila, que en 1970 grabó el álbum homónimo. En este punto Billy decidió centrarse en su propia personalidad y en su estilo, modernamente melódico, que el grupo no había podido expresar. El primer paso fue el álbum 'Cold spring harbor' (1971), dedicado, sobre todo, a su infancia en Long Island. Por fin, en 1973, logró hacerse notar.
Primero se trasladó a Filadelfia, donde grabó un pequeño éxito de carácter local, titulado 'Captain Jack', y después a la Costa Oeste, donde trabajó como pianista en algunos locales nocturnos. Esta experiencia lo indujo a componer las canciones destinadas a integrar el álbum 'Piano man'. Entre ellas, las más destacadas son 'Worse come to worst', 'Travelin' prayer' y la conmovedora 'Piano man'. En 1974 publicó 'Streetlife serenade' y, en 1976, 'Turnstiles', que contiene la bellísima canción 'New York state of mind' (también cantada por Barbra Streisand). Hasta entonces, el éxito comercial no había sido clamoroso: su tono romántico no resultaba convincente. Pero era sólo una cuestión de tiempo. En efecto, en 1977 apareció 'The stranger', obra cumbre producida por Phil Ramone, que contiene algunas de sus canciones más bellas que, publicadas en single, se convirtieron en otros tantos éxitos: 'Just the way you are', 'Only the good die young', 'Movin' out' y 'She's always a woman'. Este álbum le abrió las puertas del éxito: obtuvo un disco de platino y atrajo a sus conciertos a miles de personas. Su popularidad también se extendió por Europa. 1978 fue otro año afortunado, con la publicacion de '52nd street' (también producido por Phil Ramone), que contiene 'My life', 'Big shot' y la majestuosa 'Honesty'.
En 1980 el álbum 'Class houses' confirmó la popularidad de Billy Joel, definitivamente consolidada con los éxitos de 'You may be right' e 'It's still rock'n'roll to me'. EI nuevo decenio se abrió con un álbum en vivo, 'Songs in the attic' (1981), en el cual Joel recuperaba los temas de sus producciones menos conocidas, las precedentes a 'The stranger'. También en 1981 se publicó 'The nylon curtain', con las canciones 'Allentown', 'Pressure' y 'Goodnight Saigon', en las cuales también se enfrenta a temas de carácter social. En este disco el cantante experimentó, con gran estilo, la fuerza promocional del videoclip. Los años ochenta prosiguieron con el bellísimo 'An innocent man' (producido también por Phil Ramone, en 1983), muy centrado en la nostalgia y en sus sueños soul. Los temas más significativos del álbum son 'The longest time', 'Tell her about it' y 'Uptown girl', en cuyo vídeo aparece la modelo Christie Brinkley, que poco tiempo después se convertirá en su mujer. Tras la recopilación de éxitos 'Greatest hits' (1985), que contiene las inéditas 'You're only human (second wind)' y 'The night is still young', el nuevo álbum 'The bridge' (1986) confirmó la calidad artística del cantante. En el disco, Joel canta a dúo con Ray Charles en 'Baby grand', y con Cindy Lauper en 'Code of silence'.
Billy Joel buscaba nuevos estímulos; los encontró en el curso de una gran gira mundial que incluyó también la Unión Soviética, recogida en el álbum 'Concert' (el título está escrito con caracteres cirílicos en la cubierta del disco), grabado en Leningrado y publicado en 1987. En este disco, además de una selección de sus canciones más famosas, Joel canta también 'Back in the USSR', de The Beatles, y el himno pacifista de Bob Dylan 'The times are they a-changing'. Con un estilo ejemplar, su nuevo álbum, 'Storm front' (1990), concuerda perfectamente con esta descripción, gracias a nuevas canciones de gran éxito, como 'We didn't start the fire'.
Página oficial
http://www.billyjoel.com/
