Muchos y variados han sido los adjetivos que han calificado al jienense Joaquín Sabina, le han calificado de poeta, de simple cantautor… pero gustos y criterios aparte lo cierto es que la música y Sabina se deben mucho el uno al otro; la música le debe a Sabina algunas de las más hermosas y audaces canciones de los últimos 30 años en nuestro idioma; Sabina a la música el no acabar en un penal de tercera o algo peor.
Nace en 1949 en Úbeda (Jaén), hijo de un policía y un ama de casa, el joven Joaquín desde pequeño demostró ser muy diferente a su entorno; rechazó un reloj que le iba a regalar su padre por aprobar su reválida a cambio de una guitarra. Así, empieza a involucrarse en la música en la que está firmemente interesado; en 1965 forma un grupo llamado Los Merry Youngs, que para ser un grupo de chavales no estuvieron mal, llegando a actuar en el teatro Ideal Cinema en su Úbeda natal. Su repertorio incluía versiones de Chuck Berry, Elvis y Adriano Celentano, entre otros. A inicios de los 70 está completamente involucrado en movimientos de izquierda, lanza un cóctel molotov contra una sucursal bancaria y tras ordenarse su detención se exilia a Londres. Vive unos meses en París compartiendo piso con miembros de ETA, de los que luego siempre ha renegado. Es entrevistado al volver a Londres por el Daily Mirror, se traslada a Edimburgo y posteriormente volvió de nuevo a Londres. Allí tocaba la guitarra para sobrevivir en puntos de reunión de emigrantes españoles.
En 1976 publica un libreto de canciones llamado Memorias del exilio que consigue vender echándole mucha cara y tirando de amiguismo; más tarde consigue componer la banda sonora de la serie de la BBC The Last Crusade. En 1977 tras morir Franco volvió a España e hizo el servicio militar, además se casó con su novia argentina; ya fue en 1978, con 29 años (extraña edad para empezar una carrera musical), cuando publicó su primer disco "Inventario" (Movieplay, 1978).
Con su primer disco ya grabado y bajo el brazo sigue tocando en bares, mítines, actos sindicalistas y demás congregaciones de izquierda, ya en 1979 se produce un importantísimo evento que le da un buen empujón a su carrera: coincide en el club La Mandrágora con Javier Krahe y Alberto Pérez, de las que se publicó la grabación "La Mandrágora" (CBS, 1981) a partir de ahí consiguió actuar por primera vez en televisión.
En 1980 consigue publica su segundo disco "Malas Compañías" (Epic, 1980) en dicho disco se encuentra la canción que previamente grabó Antonio Flores, "Pongamos que hablo de Madrid"; esa fue oficialmente la primera versión que se le hizo, la canción fue un éxito y otros autores se fijaron en Sabina para que les escribiera canciones, como Ana Belén y Miguel Ríos. Un año después se edita ese directo de La Mandrágora que estaba ya grabado, y en 1984 publica "Ruleta Rusa" (Epic, 1984) y canta con Vainica Doble la sintonía del programa Con las manos en la masa; sintonía que ha quedado en la memoria colectiva de toda una generación.
En 1985 ficha por Ariola y empieza a tocar con Viceversa, donde conoce al guitarrista Pancho Varona, que desde entonces se convirtió en su inseparable. Con ellos edita "Juez Y Parte" (BMG / Ariola, 1985) y un año más tarde el directo "Joaquín Sabina y Viceversa en Directo" (BMG / Ariola, 1986). El éxito es inmediato y Sabina llega al gran público, pero tras ese directo (en el que colaboran Gurruchaga y Aute entre otros), el jienense y la banda Viceversa separan sus caminos, quedándose el guitarrista Pancho Varona en la banda de Sabina hasta la fecha.
Su siguiente álbum, "Hotel, Dulce Hotel" (BMG / Ariola, 1987), se vende como rosquillas, llegando casi al medio millón de copias, sin embargo tiene el problema de que su antigua discográfica aprovechando el éxito del cantante y publica sin su permiso un recopilatorio, cosa que enfada mucho al artista.
En 1988 se divorcia y además publica "El Hombre del Traje Gris" (BMG / Ariola, 1988), y por primera vez se va a hacer las Américas, con un gran éxito. Desde entonces la relación de Sabina con el continente americano ha sido muy estrecha, hay quien dice que incluso en algunos momentos de su carrera ha tenido más éxito en Argentina que en España, ignoro si esto es cierto al 100%, pero la verdad es que la afluencia de público en países americanos ha sido masiva desde entonces hasta ahora.
En 1989 son dos los acontecimientos importantes en la vida de Sabina: por un lado de nuevo su antigua discográfica saca una compilación sin permiso del cantante, por otro lado y hablando de algo más agradable, el artista es padre por primera vez.
Comienza la nueva década publicando "Mentiras Piadosas" (BGM / Ariola, 1990), que como curiosidad incluye una canción dedicada al famoso vigilante de seguridad metido a ladrón de furgones “El Dioni”. Tras la pertinente gira por España y América no se da un respiro y en 1992 además de ser padre por segunda vez saca a la luz "Física y Química" (BGM / Ariola, 1992). Tras eso aprovecha su popularidad para aparecer en actos políticos apoyando a IU, curiosamente unos años después Sabina se definió como ácrata en una entrevista que el periodista Pedro Ruiz le hizo en su programa “La Noche Abierta”. Entre medias publica "Esta Boca es Mía" (BMG / Ariola, 1994), su gira de presentación casi acaba con la salud del cantante, que por aquel entonces ya acusaba demasiado sus problemas con las drogas y el alcohol.
En 1996 publica "Yo, Mi, Me Conmigo" (BMG / Ariola, 1996), cuya gira promocional con Los Rodríguez fué un rotundo éxito; éxito que no tuvo en la gira conjunta con Fito Páez de "Enemigos Intimos" (Sony Music / Ariola, 1998) que tuvieron que cancelar ya que los dos artistas no podían ni fingir que se toleraban. La enemistad duró hasta 2008.
Cuando estaba ya en un terreno de cantautor respetable pero que parecía gastado, sobre todo después de su episodio con Fito Páez; vuelve a ponerse en la primera línea de fuego con su "19 Días y 500 Noches" (BMG / Ariola, 1999), que revela a un Sabina más canallesco y lúcido que nunca, el disco vende más de medio millón de copias solamente en España como el que no quiere la cosa, gana los premios a pares (dedicando uno a Yola Berrocal, Antonio David Flores y Rociíto Carrasco).
Aprovecha su vuelta al número 1 de las listas para lanzar "Nos Sobran los Motivos" (Sony BMG / Ariola, 2000), doble disco en directo; siendo el primer CD acústico y el segundo eléctrico.
En 2001 sufre un infarto cerebral, debido probablemente a sus abusos con el tabaco, el alcohol y la cocaína, por prescripción médica deja de fumar “sin parches ni pollas” como dice él, sin embargo se le ve en entrevistas en televisión con un cigarro mentolado; tras la enfermedad se ve envuelto en una depresión; declararía cabizbajo en una entrevista de “La Noche Abierta” a Pedro Ruiz que “la nariz para respirar”. Protagoniza también una agria polémica con el periodista y presentador Javier Sardá, al que tilda de gusano, y califica de telebasura su programa “Crónicas Marcianas”. Ese mismo año cede sus canciones a María Jiménez para que ella las cante, el disco relanza a la artista, que está también envuelta en polémicos cruces de declaraciones con su ex-marido José Sancho. Publica también un libro de sonetos.
En 2002 saca un libro llamado “Con Buena Letra” (Temas de Hoy, 2002) , y saca a la luz "Dímelo en la Calle" (Sony BMG / Ariola, 2002), como curiosidad cabe destacar que el subcomandante Marcos, con el que Sabina simpatiza, compone parcialmente una de las canciones. También incluye la canción “Semos diferentes” que canta con Santiago Segura para la banda sonora de la película “Torrente 2, Misión en Marbella”. Ese mismo año suspende su gira, su estado anímico le impide actuar.
Ya más animado saca a la calle "Diario de un Peatón" (Sony BMG / Ariola, 2003), el disco recibe muchas críticas, ya que integra su anterior trabajo y un disco con canciones nuevas. Sabina se defiende diciendo que esas canciones nacieron todas juntas y todas juntas debían ver la luz. Ese mismo año, todavía bajo los efectos de su depresión, se pone a escribir mucho, aunque siempre ha dicho que el término poeta le viene grande, escribe mucha poesía; sale a la luz un disco de artistas femeninas versionando sus canciones, y graba el himno del centenario del Club Atlético de Madrid, del que siempre ha sido simpatizante y seguidor.
En 2004 sale a la venta el recopilatorio centrado en sus primeros años "Todos Hablan de ti" (Sony, 2004) y compone “La rubia de la cuarta fila” para la banda sonora de "Isi/Disi" (Chema de la Peña, 2004).
Tras mucho tiempo sin hacer giras por sus problemas de salud tanto físicos como mentales saca otro disco, "Alivio de Luto" (Sony / BMG, 2005) y hace una gira acústica con sus músicos más allegados, al año siguiente se anima a hacer una gira más grande llamada “Carretera y Top Manta”; el nombre elegido para la gira suscita las críticas de Ramoncín, entonces miembro de la SGAE. Su guerra dialéctica no pasó de un cruce de declaraciones sin mucha importancia.
Ese mismo año aparece otro libro más, uno de entrevistas llamado “Sabina en Carne Viva" (Ediciones B, 2006) escrito por Javier Menéndez Flores. Empieza a colaborar como poeta en la revista Interviú, recibe de manos del Rey la medalla de oro de las bellas artes, y publica la antología "Punto… y Seguido" (Sony / BMG, 2006).
En 2007 se junta con Serrat para hacer una gira conjunta por España y América de la que sacan un disco en directo, la gira y el disco reciben el nombre de "Dos Pájaros de un Tiro" (BMG, 2007), lo novedoso del asunto es que los artistas se intercambian las canciones: Sabina canta los temas de Serrat y Serrat los de Sabina. Compone la banda sonora de la película “Un Mundo Para Julius” y saca dos libros más al mercado: “Esta Boca Sigue Siendo Mía” (Ediciones B), una recopilación de sonetos, y “A Vuelta de Correo” (Ediciones B), un epistolario. Es el protagonista de una película documental sobre su depresión, y entierra el hacha de guerra con Fito Páez; grabando juntos una canción.
En 2009 recibe la medalla de oro de la ciudad de Madrid y saca a la venta "Vinagre y Rosas (Sony / BMG, 2009)". Estos últimos años ha estado de gira, sin embargo ha declarado a diversos medios que dejará de actuar en grandes escenarios en breve, como declaró: ”donde sus conciertos no se confundan con una misa pagana”.
Tres años después vuelve a asociarse con Serrat y juntos componen "La Orquesta del Titanic" (Sony, 2012). Esta vez el andaluz y el catalán van un poco más allá; en vez de tocar en directo sus canciones ya conocidas por todos (con la divertida propuesta de intercambiarse los temas), proponen unir sus fuerzas para sacar un disco con material completamente inédito.